Un CRM hará que la gestión de clientes suba de nivel

Si sabes algo de gestión de clientes, seguro que ya estás un poco harto o harta de escuchar esta «palabrita». Parece que ahora todo lo relacionado con los negocios o es un acrónimo o un término anglosajón y si no sabes lo que es, no sabes de negocios… pero todo es más sencillo que eso.

El término CRM viene, efectivamente, del inglés Customer Relationship Management. Su traducción es más o menos “Gestión de relaciones con el cliente”.

Una vez que lo traducimos al castellano se entiende todo un poco mejor. En realidad esto es algo que se ha hecho toda la vida en los negocios. Es gestionar a los clientes de una forma adecuada para conseguir fidelizarlos y vincularlos más y mejor a tu empresa. La diferencia estriba en que ahora podremos hacerlo de manera más inteligente y eficiente.

Esto lo conseguimos porque el CRM es un software diseñado para implantar la filosofía y estrategias de marketing relacional de tu empresa. El cliente es el centro de toda la estrategia de la empresa. Lo más importante, y tu activo más valioso.

Sin clientes no eres nada.

En el mercado actual la oferta supera con creces a la demanda. El cliente ha ganado poder y capacidad de decisión sobre lo que quiere, cómo lo quiere y cuándo lo quiere. Tu obligación para poder seguir en el mercado es situarlo en el centro de tu estrategia empresarial. Ofrecerle la mejor experiencia con tu producto o servicio, solo de esta forma conseguirás retenerlo.

El CRM es un software que te permite implantar un determinado modelo de gestión de clientes

Cada empresa tiene su propio modelo de gestión de clientes. Es decir, tiene establecido y en conocimiento de todos sus empleados, cuál es su filosofía y cómo deben atenderse a sus clientes. Asimismo, qué mecanismos usar para interactuar con ellos y también una estrategia de fidelización. Pues bien, el CRM te permite analizar los datos y tomar decisiones comerciales a partir de estas relaciones. Todo esto teniendo como base la gestión de las relaciones de los clientes a partir del análisis de las interacciones con la empresa. Eso suponen llamadas, reuniones, emails, compras, reclamaciones o incidencias. Con un software creado específicamente para ello, te permite analizar los datos y tomar decisiones comerciales a partir de estas relaciones.

Una empresa que utiliza el CRM como modelo de gestión busca diferenciarse de sus competidores a través del uso de la información que le aportan sus clientes. Se acerca a ellos y aprende de cada una de sus interacciones con el objetivo de incrementar su propuesta de valor.

Aprender y aplicar

Porque CRM es aprender de nuestros clientes, situándolos en el centro de nuestra estrategia y trabajando por y para ellos. Un CRM no es solo un repositorio de base de datos, ni un directorio. Un CRM es una unidad de inteligencia empresarial de la que sacar conclusiones. Por tanto, también para tomar decisiones que pueden afectar en gran medida en el devenir de una empresa.

Y es que CRM es, en definitiva, una manera de desarrollar la empresa a partir del conocimiento de los clientes. Permite diferenciarlos y segmentarlos de acuerdo a sus preferencias para darles la experiencia que ellos esperan y no la que nosotros nos inventamos.

Estas siglas, entendidas en profundidad, son sinónimo de fidelización de clientes, comprensión de nichos de mercado y desarrollo de negocio.

Si quieres que hablemos de gestión de clientes y de CRM, así de cómo implantar un sistema de gestión con los clientes de forma sencilla, aquí me tienes.

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